Próximo destino, Tona

Soy un chico de barrio, habitual juguetón en los parques cada verano, infinitas partidas al escondite que no terminaban jamás, alomejor era porque soy demasiado astuto, o simplemente el que la paraba no era capaz de encontrarme escondido dentro del coche de mi padre, partidos de fútbol que siempre terminaban mal y causando enfados a los vecinos allí residentes, amistades que aún puedo presumir de que perduran.
Cuando te acostumbras a lo habitual y además te gusta, no quieres dejarlo nunca. Es lo que me pasó a la edad de 16 años, justo al terminar la E.S.O. Mi próximo destino era Tona, bonito y verde pueblo perteneciente a la comarca de Osona (Catalunya) a 5 minutos de Vic, cada vez más habitado, rodeado de parques con ese olor característico de las granjas, frío accentuado en invierno, pero no tanta calor en verano como la que sufría en mi barrio natal. Mi propósito de mi estancia en Tona era, aprovechando que ya vivian mis tios y mi abuela, sacarme un grado medio de hosteleria. La idea de ser cocinero me motivaba
Pués bien, yo me imaginaba que haciendo el esfuerzo de dejar mi vida, mis amigos, incluso lo que es para mi el significado de la vida: mi madre, después se veria favorecido a través de nuevas amistades y nuevas experiencias, hasta me puse contento porque pensé que me saldria una parienta...
Amistades en su pleno significado, no es exactamente lo que llegué a encontrar, a excepción de un fenomenal amigo que aprecio y sobretodo admiro mucho.
Al termino de mi primer año viviendo en Tona, ya deseaba volver a mis raíces, pues nada de lo que yo habia pensado iba como queria, pero aún quedaba un año insufrible más. Cada dia que pasaba deseaba con más ansias volver a lo que fuera mi casa desde que tengo el privilegio de poder pensar.
Aprendí muchas cosas de las cuales ahora hago uso de ellas para poder convivír con mi padre, y en cierto modo es algo positivo que puedo sacar de la experiencia en esa escuela llamada ''Escola d'Hosteleria d'Osona''
Y porfín acabé el grado medio, mi velocidad para decidir que queria volver a mi hogar de verdad, me sorprendió hasta a mi. Perfectamente mis tios y mi abuela podian pensar que ellos eran el motivo por el qual deseaba tanto irme de su casa, pero no es asi ni mucho menos, ellos actuaron como si de mis padres se trataran.
Terminé el curso en el verano de 2009, volví a sentir el calor sofocante de mi barrio y las personas con las que me habia criado en mi niñez, volví a respirar felicidad...